PARÍS.- La reina de las redes sociales, Kim Kardashian, declara este martes ante un tribunal de París para testificar en el juicio por el espectacular robo de joyas de un valor millonario que sufrió hace casi una década en un hotel de la capital sa.
Está previsto que la influencer y empresaria testifique y posteriormente hará una declaración ante las cámaras 6f235h
PARÍS.- La reina de las redes sociales, Kim Kardashian, declara este martes ante un tribunal de París para testificar en el juicio por el espectacular robo de joyas de un valor millonario que sufrió hace casi una década en un hotel de la capital sa.
Desde finales de abril, diez sospechosos están siendo juzgados por el robo armado en 2016 de joyas valoradas en 10 millones de dólares de la estrella de la telerrealidad.
Está previsto que la influencer y empresaria testifique a las 13H30 (11H30 GMT). Posteriormente hará una declaración ante las cámaras, indicaron a AFP sus abogados.
Periodistas de todo el mundo, fanáticos y curiosos comenzaron a congregarse ante el tribunal desde temprano por la mañana. "Somos fanáticos de Kim y queremos apoyarla", explicó Clément Treboutte, que acudió junto a dos amigos, todos vestidos con sus mejores galas.
Dentro del tribunal, ubicado en pleno corazón de París, las cámaras estaban alineadas a lo largo de decenas de metros en el pasillo reservado a los medios de comunicación. "Sala llena", rezaba un cartel. Cerca de 500 periodistas, muchos de ellos extranjeros, están acreditados para el juicio.
La audiencia de la mañana estuvo dedicada al testimonio de la exestilista de Kardashian, Simone Bretter, que logró esconderse en la planta baja del dúplex de un lujoso hotel parisino en el que estaba alojada la influencer cuando ocurrió el robo la noche del 2 al 3 de octubre.
"La conozco muy bien, reconozco su voz, su risa, sus entonaciones, cuando está contenta o cuando las cosas no van bien". Por eso, cuando la despertó un ruido a eso de las tres de la madrugada, supo enseguida que había un problema.
"Era un tono que nunca había oído de Kim. Era terror", describió en el estrado. "Escuché que dijo: 'Tengo bebés y necesito vivir. Llévenselo todo, déjenme vivir".
Bretter se encerró en su cuarto de baño y alertó al guardaespaldas de Kardashian. "Pensé que estaban violando a mi amiga, que la matarían. Entonces yo sería la siguiente", dijo con voz temblorosa.
Kardashian, que entonces tenía 35 años, fue amenazada con una pistola en la cabeza, atada y amordazada.
Hombres enmascarados huyeron con millones de dólares en joyas, entre ellas el anillo de diamantes de 3,5 millones de euros que le regaló el rapero Kanye West, su esposo en aquel entonces.
En su momento, la prensa sa describió el evento como "el robo del siglo".
En el banquillo de los acusados se sientan en su mayoría hombres de entre 60 y 70 años con antecedentes criminales. Responden a apodos como "el viejo Omar" u "Ojos Azules" que recuerdan a los ladrones a la antigua del cine negro francés de los 1960 y 1970.
"Son todo un equipo", dijo el investigador Michel Malecot. "Pero cometieron algunos errores", como dejar rastros de ADN que permitieron su identificación.
Aomar Ait Khedache, conocido como "el viejo Omar", de 68 años, itió haber atado a Kardashian, pero niega ser el cerebro detrás del golpe.
El investigador Michel Malecot contó que un hombre llamado Gary Madar, el hermano del chófer de Kardashian en París, alertó a los sospechosos de que la estrella se encontraba: "en territorio francés".
El abogado de este sospechoso ridiculizó esta acusación señalando que los 350 millones de seguidores de las redes sociales de Kardashian sabían perfectamente su paradero.
La noche del robo en cuestión podría haber sido muy distinta. Según se contó en el tribunal la semana pasada, Kim sopesó ir de fiesta con su hermana Kourtney, pero finalmente decidió quedarse en el hotel.
Su conductor Michael Madar, cuya compañía facturaba a la pareja Kardashian/West más de 400.000 dólares anuales, había estado trabajando sin parar por 21 horas y pidió a un compañero que lo reemplazara en el trayecto hacia el local nocturno.
Pero su sustituto Mohammed Q. y el guardaespaldas de Kardashian, Pascal D., volvieron rápidamente al hotel después de que la estrella, que intentó llamarlos, no respondiera al teléfono cuando le devolvieron la llamada.
"Vi que el ascensor estaba en la primera planta, donde se hospedaba Kim", explicó al tribunal Pascal D.
Cuando la encontraron, la influencer estaba "en un estado terrible, lloraba histéricamente", contó al tribunal. "Pregunté qué había pasado y dijo que le habían robado", agregó.
Kim Kardashian se hizo famosa al comienzo de los 2000 tras protagonizar programas de telerrealidad.
Es de las personas más seguidas en X e Instagram y la revista Time la sitúa entre las 100 celebridades más influyentes del planeta.
El juicio por el robo culminará el 23 de mayo.
FUENTE: AFP